Traducido al español por Pavel Rubio-Hormazabal
En su libro ‘Violencia Lenta y el Ambientalismo del Pobre’, Rob Nixon presenta la noción de ‘violencia lenta’ como, y cito aquí, ‘una violencia que ocurre gradualmente y fuera de vista, una violencia de destrucción retrasada que es dispersada a través del tiempo y espacio, una violencia friccional que es típicamente para nada vista como violencia’ (fin de la cita). Este tipo de violencia que se construye sobre largos lapsos de tiempo y es retrasada en sus efectos debe ser contrastada con la violencia más instantánea y espectacular (por ejemplo, la violencia de la guerra) que no escapa de nuestra atención porque es fácil y forzadamente visible. El imperativo de una academia crítica es de reconocer, registrar, entender y contrarrestar esta forma de violencia que a menudo se mantiene invisible o es fácilmente olvidada o rechazada.
El argumento de Nixon se centra principalmente alrededor del ambientalismo y de los efectos de la violencia lenta, – sean estos expresado en forma de deforestación, acumulación tóxica, acidificación de los océanos, o cambio climático – en los pobres. El concepto de violencia lenta, sin embargo, es suficientemente productivo para permitir nuevas aplicaciones mas allá de las examinadas por Nixon, sea el trauma crónico de desposesión de vivienda (como en la obra de Rachel Pain, por ejemplo) o las experiencias de refugiados en campos (como en la obra de Davies y colegas). En el mismo sentido, el concepto ha invitado refinamientos críticos y reconceptualizaciones. La atención que ‘violencia lenta’ otorga a nociones de cambio y movimiento a través del tiempo y espacio permite una mirada más dinámica y crítica al ‘tiempo no-espectacular’ y sus violentas manifestaciones. En este sentido, nos invita a reflexionar más profundamente sobre, y dar más atención a, las temporalidades de la violencia, especialmente aquellas que usualmente cubren la existencia y manifestaciones de violencia cotidiana.
A pesar de que los Estudios de la Niñez no son extraños a nociones similares y procesos que problematizan percepciones de violencia en niñez como el de violencia estructural, no se ha logrado, hasta ahora, considerar el concepto de violencia lenta en cualquier forma significativa (excepciones, por ejemplo, incluirían el trabajo de De Leeuw (Li’ou) quien ha usado el concepto productivamente en el contexto de la violencia estatal sobre mujeres y niños indígenas en Canadá). El webinar de hoy intenta provocar discusión sobre la potencial utilidad de ‘violencia lenta’ como un concepto critico para investigación y teorización en los Estudios de la Niñez. Les proponemos a los comentadores invitados y a la audiencia reflexionar a partir de, entre otras, las siguientes preguntas:
- ¿Cuándo, dónde y cómo puede el concepto de violencia lenta, en ambas formas de manifestación espacial y temporal, ser aplicado útilmente, elaborado, matizado, reelaborado o expandido en nuestro trabajo con niños y niñez?
- ¿Cuáles infancias y cuáles niños se transforman en víctimas de violencia lenta?
- ¿Qué tipos de nuevas políticas y nuevas formas de resistencia pueden generar futuros trabajos en violencia lenta entre niños, sus familias y comunidades, e investigadores-activistas?
- ¿Qué nuevas colaboraciones y alianzas con otros campos y disciplinas podríamos necesitar activar para aprehender la violencia lenta y sus efectos en niños?
- ¿Cómo podemos tratar el desafío de representación de crear narrativas potentes y convincentes que capturen la amplia imaginación sobre la urgencia de aplacar la violencia lenta en niñez cuando tales formas de violencia se mantienen no-espectaculares y elusivas?
Citar como: Spyros Spyrou, “Violencia lenta: Comentarios iniciales,” en Reimagining Childhood Studies, 10 de febrero de 2021, https://reimaginingchildhoodstudies.com/violencia-lenta-comentarios-iniciales
Traducido al español por Pavel Rubio-Hormazabal.